En Finangher, estamos comprometidos con la contabilidad del impacto ambiental, que básicamente significa cuantificar cuánto de basura consume y produce un individuo o una organización, a partir de registros de transacciones y metadatos. Por ejemplo, en el colegio Manuel Fidencio, al cierre del año, se habían contabilizado 256 kg de plástico de botellas PET, 567 kg de papel y cartón, y 1356 kg de basura diversa como útiles de oficina, residuos con componentes plásticos, aluminio, etc. Con esa información, se puede mapear la producción y consumo de basura para implementar iniciativas de economía circular.
Gracias a la proliferación de los smartphones, el mayor acceso a internet y la App Finangher, ya no es necesario imprimir vouchers, ya que los registros de transacciones, incluyendo facturas, se sincronizan en la nube y están disponibles de extremo a extremo entre entidades, directamente desde el teléfono. Cada interacción económica y financiera tiene un impacto en el ambiente, ya sea positivo o negativo.
En Finangher pretendemos asignar puntuaciones de impacto a cada recurso utilizado por cada entidad en su día a día para llevar una contabilidad ambiental automatizada. Esto nos permite preparar estados financieros que incluyan los impactos de externalidades (positivas y negativas) generadas por las entidades, conduciendo a una nueva visión del beneficio empresarial.
La contabilidad en red permite llevar registros detallados de la generación y consumo de residuos por cada individuo y organización. Con esta información, se generan estadísticas útiles para plantear nuevas iniciativas que contribuyan a la economía circular.
Actualizado el 18/07/2024